La vida es sueño
La vida es sueño fue publicada en el año de nuestro Señor 1635, su autor Pedro Clalderón de la Barca, primero tuvo estudios religiosos pero cambió de opinión y tomó la carrera militar, destacando como soldado al servicio del Duque de Infantado durante el sitio de Fuenterrabía y en la guerra de secesión de Cataluña.
La obra que nos ocupa de este autor del siglo de Oro, es dramática aunque no llega a ser tragedia. Al nacer Segismundo, príncipe heredero de Polonia, este es encerrado en una torre separándole de todo contacto con el mundo exterior, porque su madre antes de que él naciera tuvo un sueño en el que veía a su hijo como un tirano y malvado dictador. Su madre muere en el parto y su padre, el rey Basilio, no se plantea más las cosas, lo encierra y punto.
Cuando Segismundo alcanza la edad madura su padre decide ponerle a prueba en el mundo abierto y narcotizándolo lo lleva hasta su palacio. La idea es que si Segismundo se muestra realmente como un asesino, se le volverá nuevamente a la torre de la misma manera que llegó a palacio y éste pensará que todo ha sido un sueño. Esto sucede tal y como se ha dicho.
Segismundo recupera la libertad en manos del pueblo y cambia su comportamiento, perdonando a su padre por el encierro y a otros que contribuyeron a ello, demostrando así que el destino de los astros no era fiable.
Sé que es una obra de arte esta obra de teatro pero a mí me ha aburrido bastante el estilo poético y el complejo vocabulario. Si es cierto que hay frases preciosas, citas por todos conocidas pero no creo que vuelva a leerla, claro que ahora que recuerdo cuando estudiaba COU, mi profesor de lengua se atrevió a llevarnos a madrid a ver esta obra en, si no recuerdo mal, el teatro Calderón. Sólo recuerdo que nos reímos mucho (ya me diréis vosotros de qué) y que a pesar de eso nos aburrimos demasiado.
Eva, veo que te vas aficionando a la poesía, esto es como lo de la tónica, hay que probarla más. Hace siglos que lo leí y me gustó, ya veo que a tí no mucho que quieres, despues de los dos oficios del pobre Calderón, primero cura y luego militar…..eso quieras que no marca, digo yo.
Gracias, y ya había oído que Don Pedro tenía su carácter… 🙂
Lo que me ahorro, menos mal que te lo han dicho, así no me pones en duda, jejeje.
Yo sólo leí y tuve que aprender, allá en mis tiempos mozos, el monólogo de Segismundo y aún ahora recuerdo estrofas bastante largas. Pero fuera de eso nada y visto tu reseña creo que voy a seguir así.
🙂
Besos.
Ascen pues a tu libre albedrio, yo no lo reeleré, eso seguro.
Un besote
Pues yo no recuerdo tampoco haberla leído en mis tiempos de estudiante, aunque sí comentarla (leíamos en clase y comentabamos. Imaginaros los cometarios …). Creo que nunca me hubiera dado por leerla, y después de tu reseña sigo creyendo lo mismo.
Un saludo.
Buah Jesús, te acuerdas de aquellas clases insufribles de literatura en que leías un pequeño texto y luego te pasabas todo el trimestre comentándolo? y tú te preguntabas, pero bueno, ¿cómo es posible que de 40 lineras se pueda habalar tanto y tanto? ay madre, que tiempos aquellos.
Yo la leí en el Insituto, hará unos … bueno, la acababan de estrenar!
No recuerdo cómo era en su conjunto, pero el monólogo de Segismundo sí lo he leído muchas veces, y es maravilloso «sueña el rico en su riqueza….»
Me encanta el teatro clásico español, aunque prefiero las comedias de capa y espada, Lope y Calderón, los mejores del mundo-mundial.
Gracias por traerlo aquí, me encanta ver literatura clásica (sobre todo española).
Isi, después de Tristram Shandy esto te parecería coser y cantar, porque no debe tener ni 150 páginas, y con una letra que no produce hipermetropía.
Lo que me ahorro, pero que graciosa eres madre! yo era la que le llevaba los tinteros llenos de tinta a Calderón para que pudiera seguir escribiendo y no veas como se ponía conmigo cuando llegaba con retraso.
Pues mira que a mí ni siquiera me obligaron a leerla, así que por descontado que no lo he hecho. Además con Tristram ya tengo obras clásicas para una buena temporada, jejeej.
Pero la verdad es que la historia es muy interesante.
Isi, pues si tienes un ratito, que lo dudo, léetelo, no es demasiado largo, pero vamos que tampoco te pierdes gran cosa.
Un abrazo
Pues a La vida es sueño no la leo desde que estaba en el preuniversitario, digamos el instituto y recuerdo que me pasó que había partes que me gustaban mucho y otras que quería saltar… pero las que son como la que pones de ejemplo, quedaron de referente cultural hasta la actualidad…y por cierto, que es un meme?
Yo tambien soy nueva en eso..
Esto de vivir, eso mismo me ha pasado a mi, hay partes muy amenas y rapiditas pero hay otras que resultan casi insufribles. No soy una entendida en literatura, se nota pero….
Ni idea de lo que es un meme ya lo he preguntado por ahí.
Eva, he estado siguiendo tu Blog y me gusta mucho. Con la vida es un sueño de Calderon de Barca, aunque en su época fué presentada como comedia, dista mucho de ello. No es el libro más ameno, pero tiene su belleza, por ejemplo Segismundo al perdonarle la vida a Clotaldo demuestra que ha cambiado y logra vencer a su destino. Un abrazo
R.C, bienvenido físicamente al blog aunque ya sé que lo has estado siguiendo a través de bitácoras: muchas gracias. Yo desde luego, tras haber visto la obra, hace ya siglos, y haberla leído hace sólo unos días, le veo poco de comedia, la verdad. A mi ha habido momentos en que me ha aburrido, me perdía en esas rimas tan atípicas, con ese vocabulario tan específico, pero bueno se puede leer.
Serás bienvenido siempre que quieras. Un saludo
Eva, guapa, tienes algo para ti en mi blog, y esta vez es algo mejor que un meme (que por cierto, yo no sabia que era un meme, se ve que soy nueva en este mundillo), que lo disfrutes
Besos
¿sábes ya lo que es un meme? dímelo que yo aún no lo sé. Gracias por el nuevo regalo, ¡vales un potosí!