Catalina Solis, aquella jovencita que realizó un viaje al Caribe,  junto con su hermano, para encontrarse con su marido por poderes pero que sufrió un naufragio y acabó perdiendo a su hermano y sola, en una isla supuestamente abandonada. Para saber más leed la reseña de Tierra Firme.

Pues como decía, Catalina Solís vive apaciblemente en su villa de Margarita, como viuda de «un latonero margariteño a quien de pequeño, la coz de una mula había dejado con media cabeza y ningún entendimiento». Allí a una hora intespetuosa (la hora de la siesta) recibe la visita de Rodrigo, su compadre en su anterior época como Martín Nevares, para darle un conjunto de fatídicas noticias: Su padre había sido apresado por el gobernador de Cartagena por crímenes de lesa majestad y la condena sería, casi seguro, la pena de muerte. Éste sería trasladado a Sevilla donde se le juzgaría por contrabando y por mercadear armas con el enemigo. Pero, no terminan aquí las malas noticias, Santa Marta, el pueblo donde vivían sus padres adoptivos, había sido saqueado, sus habitantes asesinados y todo había ardido bajo las llamas por orden del pirata flamenco Jakob Lundch.

Así, Catalina no se lo piensa, se coloca las calzas de Martín y marcha para visitar a su madre, muy grave tras el incendio. Una vez hecho esto organiza todo para un viaje a Sevilla con el fin de intentar liberar a su padre. Cuando llega a la prisión, su padre sólo tiene tiempo de hacerla jurar venganza contra los culpables de tan magna felonía. los hermanos Curvo. Catalina, a la par que Martín, intentará llevar a buen término esta venganza.

Si leísteis Tierra Firme, no podéis dejar pasar esta segunda parte. Matilde Asensi vuelve a traernos una novela de aventuras y de acción, venganzas, engaños y fullerías. Con un lenguaje muy cuidado y una narrativa muy ágil, nos traslada hasta una época en la que no se ponía el sol en el Imperio español. Un tiempo en el que la picaresca estaba en cada esquina, donde la pobreza del pueblo se contraponía a la riqueza del imperio, de la corona. La trama da lugar a numerosas situaciones cómicas haciendo uso del saber popular y de su vocabularío, típico de la época. con un final realmente inesperado y que por supuesto no voy a desvelar en el blog, acaba esta novela con una venganza pendiente que espero ansiosa que se complete en la tercera y última parte.

Si me gustó la primera parte, ésta me ha resultado mucho mejor. Aquí os dejo la ruta que siguió Catalina en su paso por Sevilla.

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