Cuando El corazón del caimán llegó a mi bandeja de correo en forma de boletín de novedades de la editorial he de admitir que me llamó bastante la atención pero también he de decir que la portada me invitaba a pensar que era más una novela de amor o de landscape, géneros que no suelo leer. Cuando me invitaron a leerla, no obstante, la acepté de buena gana y hoy puedo decir que no me arrepiento en absoluto y que además, he aprendido muchas cosas sobre una época difícil de conocer.

El corazón del caimán se sitúa a caballo entre España y Cuba y se desarrolla en muchos tiempos, no lejanos ninguno entre ellos.

En 1897, Ada recibe la noticia de que su marido ha desaparecido en combate. Ella está segura de que continúa vivo y, aunque no tiene ninguna confirmación de ello, se propone cruzar Cuba de extremo a extremo, y sin ningún destino fijo, en compañía de la mujer que siempre ha estado junto a ella, Pompeya, una mujer de color que fue criada y educada junto a nuestra protagonista. En su viaje sin destino conoceremos  la infancia de Ada, quien fue entregada a su tía abuela, Elvira, la otra gran protagonista de la novela. De ella conoceremos su niñez en el norte de España, las razones por las que marchó a Cuba y cómo se hizo con una de las mayores haciendas de la isla. De la misma forma sabremos de Darío Silva, el padre de Ada, y sus misteriosas razones para abandonar a su hija y dejársela a unos desconocidos aunque fueran familiares.

Todo esto lo sabremos cruzando un país en guerra, yendo de frente a frente. Dos mujeres solas enfrentándose a un camino lleno de peligros y todo por encontrar a un marido desaparecido que posiblemente esté muerto en cualquier cuneta cubana. No estamos ante una novela de amor, no lo creáis ni por un instante. Desde la primera pagina me sentí atrapada por esta novela que es la historia de una obsesión más que de un amor, al menos en mi opinión. La autora sabe de lo que está hablando. Los ritos ancestrales de un pueblo, una guerra por la independencia, una historia de odios y secretos y todo ello en el corazón del caimán, La Oriental, una hacienda en el corazón de Cuba.

La autora, en su primera incursión en las letras, nos ofrece una novela redonda. Un principio y un fin, como a mi me gusta, porque no creáis que las novelas tienen siempre un final bien cerrado. Leyendo esta novela encontraremos muchas historias que discurren en diferentes momentos del siglo XIX pero todas están unidas de tal forma que parece que hubiera magia en sus páginas.

Los personajes están muy bien perfilados, cuentan, todos ellos, con mucho coraje y una gran humanidad, son personajes cercanos al lector. Mi personaje preferido, sin duda, ha sido Nel, el muchacho que cuidaba vacas allá en las montañas cántabras… y hasta aquí puedo leer.

Quisiera destacar también lo bien que la autora ha sabido recrear la atmósfera. Desde esa España de señoritos y de trabajadores, pasando por las condiciones infrahumanas en las que se encontraron aquellos que decidieron cruzar el océano para encontrar su tierra prometida; las ratas corriendo por encima de sus cuerpos y totalmente hacinados a pesar de haber pagado un pasaje, o lo cruenta y sangrienta que fue la guerra de Cuba, y en esto me quiero detener.

¿Qué sabemos nosotros de la Guerra de Cuba? Sabemos lo que nos han contado, lo que nos han querido contar y se han dicho muchas, muchas barbaridades. Todo esto es muy poco. Sólo he leído dos novelas en las que se hable del conflicto y en ambas destaca la crudeza con la que se habla de este momento. Nos enfrentamos a una guerra muy cruel y muy injusta, soldados no preparados, pagados en muchos casos, delincuentes o presidiarios llevando el uniforme español, niños…¡vamos la flor y nata del ejército español! Claro está, nos devoraron, nos hicieron añicos y las crónicas hablan muy poquito de estas auténticas matanzas. Pilar Ruiz cruza esta guerra y lo hace deteniéndose en los detalles, mostrándonos una realidad muy difícil de aceptar, y lo hace muy bien.

El corazón del caimán es una historia de vidas cruzadas, de un viaje sin destino, de amor y de guerra, de una obsesión. Una trama bien contada y bonita, que recomiendo a todo aquel que quiera zambullirse en una buena historia.

Pilar Ruiz (Santander, 1969), licenciada en Periodismo, máster en guion y diplomada en dirección cinematográfica, desarrolla su carrera profesional en diversas disciplinas del medio audiovisual: guionista de cine y series de televisión (La señora, TVE). Como directora de cine, su largometraje Los nombres de Alicia (2005) obtuvo una nominación al Mejor Sonido en los premios Goya, la Mención especial del Jurado en el Festival de Málaga y el Premio especial del Jurado en el Festival de Miami. El corazón del caimán es su primera novela.

Fuente de la imagen de Pilar Ruiz: Ediciones B ©Germán Gómez

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