Joy acaba de descubrir que su madre es su tía y su tía su madre, que su padre no es su padre y que además, él que la ha criado como si fuera carne de su carne se ha quitado lña vida y Joy se culpa de ello. Por esta razón y por el hechizo y magnetismo que ejerce sobre ellala nueva CHina comunista decide ir al país de sus ancestros para ayudar al desarrollo del país y a que este ocupe un lugar importante en el mundo y, de paso, buscar a su padre biológico. El ímpetu de la juventud (Joy tiene 19 años) es lo que la lleva a emprender un viaje el cual, sin darse cuenta, será sin retorno ya que verá cómo tiene que entregar su pasaporte estadounidense nada más entrar en China. Tiene el objetivo de unirse a la maquinaria china que esta trabajanado en el gran Salto Adelante de Mao.

Paralelamente Pearl, su madre (su tía en realidad), sigue los pasos de la joven para intentar convencerla de que vuelva con ella a los Estados Unidos.

Joy encuentra rapida y facilmente a su padre, ZG, un famoso artista caido ahora en desgracia, un hombre del que estuvieron enamoradas su madre y su tía. Joy marcha junto a su progenitor al campo, a una comuna conocida como Dragón Verde, para enseñar a los campesions a dibijar y asi redimirse ante el régimen. Allí Joy se enamora de Tao, un joven campesino que se muestra amble y cariñoso con ella y con el que acabrá casándose.

Mientras tanto, Pearl tiene que integrarse en esa sociedad que intenta romper con las viejas tradiciones y se pone a trabajar como recogedora de papel mientras encuentra a su hija.

Pearl ve la decadencia de Shangai, la ciudad que tanto había amdo, y de China. Joy sólo ve ideales que la ciegan en esa comuna en la que se establece.

Poco a poco Joy se da cuenta de que nada es tan bonito como se lo pintaban en aquel grupo al que se unió en Los Estados Unidos pero, para cuando quiere darse cuenta ya es demasiado tarde y el precio que tendrá que pagar por su error será muy alto.

Sueños de felicidad es la continuación de «Dos chicas de Shangai», libro que yo no he leído y que no considero necesario leer para poder disfrutar de esta novela al cien por cien aunque no dudo que su lectura debe enriquecer a esta.

Es una novela narrada a dos veces en tiempo presente (Joy y Pearl) pero, a pesar de ser dos personas las que hablan el tono no cambia de una a otra en absoluto, menos mal que la autora introduce cada capítulo con el nombre de la persona que va a narrarlo porque si no fuera así habría sido difícl diferenciarlas.

   Lisa See nos traslada a la China roja de los años 50, cuando el egimen comunista está, casi, recién estrenado, cuando se lanzaban Sputniks casi a diario, esto es: cultivar un campo en un sólo día, hacer una carretera en un sólo día… esto es lo que se llamaba lanzar un sputnik, cuando las zonas agrarias se organizaban en comunas. La autora nos muestra las diferencias entre la China rural y la China urbana con una gran dureza. En ocasiones cuenta sutilmente a lo que conducen los castigos y humillaciones a los que someten a los «derechistas» y a los «capitalistas» que de alguna manera se saltaban las normas del régimen pero hay también imágenes muy crueles y macabras en este libro como cuando la autora nara lo que es obligada a hacer una mujer con pies de flor de loto o la manera en que los campesinos chinos intentaban engañar al hambre o lo que se podía llegar a hacer a un hijo.

Lisa See describe magistralmente los años de la hambruna, la manipulación del pueblo por parte del gobierno, el escaso valor de una mujer o, peor aún, de una niña, la anulación del individuo…

Los escenarios descritos en la novela son tan terribles que te da miedo pasar de página pero me voy a quedar con lo más bonito del libro: hasta donde puede llegar una madre para salvar a su hijo, y con un párrafo:

TÍTULO: Sueños de felicidad
AUTOR: Lisa See
PÁGINAS: 453
EDITORIAL: Bruguera
AÑO DE EDICIÓN: 2012
PRECIO: 19,48 €

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