Novedades editoriales. Febrero 2016. Galaxia Gutenberg e Impedimenta

Hoy termino la serie de entradas en las que he mostrado las novedades editoriales de febrero que me han resultado atractivas. Si las últimas que os enseñé no os convencieron, vamos a ver si acierto con estas de Galaxia Gutenberg y de Impedimenta.

Vida hogareña, de Marilynne Robinson

Un clásico moderno, Vida hogareña es la historia de Ruth y su hermana menor, Lucille, que crecen sin orden ni concierto, primero bajo el cuidado de una abuela, luego de dos tías abuelas cómicamente ineptas, y, finalmente, de Sylvie, su excéntrica y remota tía. La casa familiar se encuentra en el pueblecillo de Fingerbone situado en un lago glacial del lejano oeste americano, el mismo lago donde su abuelo murió en un espectacular choque de trenes, y su madre se tiró por un acantilado. Es un pueblo «castigado por un paisaje descomunal y el clima extravagante, y castigado de nuevo por la conciencia de que toda la historia de la humanidad se había producido en otros lugares». La lucha de Ruth y Lucille hacia la edad adulta ilumina con una extraordinaria belleza el precio de la pérdida y la supervivencia, y la resaca peligrosa y profunda de la transitoriedad.

Las rosas de Stalin, de Monika Zgustova

«Mi nombre es Svetlana Alilúyeva. Nací el 28 de febrero de 1926. Mi padre murió en 1953. Se llamaba Josif Stalin.»

La única hija del dictador soviético tuvo un destino increíble. A los dieciséis años se enamoró de un médico judío, a quien su padre envió al Gulag. Más tarde, en 1963, se enamoró de nuevo, en esta ocasión de un comunista hindú, y cuando él murió Svetlana quiso llevar sus cenizas a la India. Una vez allí, solicitó asilo político a través de la embajada de Estados Unidos, abandonando a sus dos hijos en la URSS. En Estados Unidos se hizo rica con su famoso libro Veinte cartas a un amigo, mientras se convertía en objetivo prioritario de uno y otro bando en la Guerra Fría. Tuvo que ocultarse no sólo en los EE.UU., sino también en Europa. Svetlana murió en 2011 en Wisconsin. Monika Zgustova nos presenta aquí una novela biográfica original, emocionante y llena de giros inesperados.

Los Sioux, de Irene Handl

Los Benoir componen una aristocrática y excéntrica familia que, debido a sus altas cotas de esnobismo y a su carácter entre original y amoral, se ve arrastrada hacia las situaciones más desconcertantes. Un nuevo miembro acaba de llegar a sus filas después de que la prepotente Marguerite «Mimí» Benoir, una belleza que cambia de marido como quien cambia de camisa, se haya casado con todo un caballero: Vincent Castleton, que aporta al matrimonio su flema inglesa y un toque cockney. Ella, a su vez, lleva consigo a George, un niño de nueve años fruto de un primer enlace con un primo suyo que falleció en un desgraciado accidente. Junto a una enorme fortuna, el pequeño ha heredado una terrible enfermedad y un soberbio carácter. La convivencia de todos estos peculiares personajes hará que salga a la luz lo más estrambótico de una ya de por sí extravagante estirpe.