«Rojo Veneciano» es una cautivadora novela escrita por Óscar Soto Colás, que nos sumerge en un fascinante escenario ambientado en Valladolid, Roma y Venecia en el siglo XVII. La historia se centra en la vida de Juana de Castro, quien vive en la localidad vallisoletana en 1620 junto a su padre, un maestro de pintores que le enseña el oficio. Juana anhela ingresar en un mundo dominado por hombres, una meta que se le presenta inalcanzable.

Sin embargo, una mala decisión de su padre desencadena una serie de desgracias en la vida de Juana, incluyendo su matrimonio con un pintor extranjero. A partir de ese momento, Juana emprende un viaje a través de Europa, donde experimentará momentos de felicidad, aunque la vida le deparará innumerables desafíos. Juana se presenta como un personaje extraordinario, dotado de fuerza e inteligencia, que se niega a aceptar un destino impuesto por otros.

En su travesía, Juana entabla una amistad con Robert, un marchante de arte cuyo personaje resulta delicioso. Además, el autor nos sorprende con la aparición de un cameo de Cervantes durante el viaje de Juana a Roma, donde ambos personajes entablarán conversaciones inolvidables. A lo largo de la novela, también conoceremos a personajes como Antonio y Paola Ferrara, así como a Wilhem Jansen, quienes representan un contrapunto a la bondad de los protagonistas anteriores.

La peste en Venecia como escenario y protagonista…

La narrativa de Óscar Soto Colás es absolutamente maravillosa, capturando la esencia de cada escenario y personaje con maestría. En «Rojo Veneciano», el autor también aborda el impacto devastador de la peste en Venecia. A medida que la historia se desenvuelve, una plaga mortal se extiende por la ciudad, sumiéndola en el caos y el sufrimiento. La forma en que el autor describe el ambiente, el miedo y el dolor en este período es sublime, permitiendo al lector sumergirse en la cruda realidad de la epidemia.

Esta plaga, una enfermedad altamente contagiosa y mortífera, se convierte en un trasfondo ominoso que afecta a todos los aspectos de la vida en Venecia. Los habitantes de la ciudad se enfrentan a una amenaza constante, viviendo con el temor de contraer la enfermedad y perder a sus seres queridos. Las calles antes bulliciosas se ven abandonadas y cubiertas de desolación, mientras que los hospitales y las casas se llenan de enfermos y moribundos.

El autor retrata vívidamente los estragos físicos y emocionales causados por la peste. Describe los síntomas terribles que padecen los afectados, como la fiebre alta, las erupciones cutáneas y los delirios. Además, el miedo y la desesperación se apoderan de la población, generando un clima de incertidumbre y desconfianza. La peste no solo afecta la salud de las personas, sino también la economía, la cultura y la vida cotidiana de Venecia.

En medio de este panorama desolador, los personajes de la novela se enfrentan a duras pruebas y desafíos. Juana de Castro y aquellos que la rodean luchan por sobrevivir y encontrar esperanza en medio de la tragedia. La presencia de la peste en «Rojo Veneciano» no solo sirve como un elemento histórico y contextual, sino que también profundiza en la condición humana y en cómo los personajes reaccionan frente a la adversidad. La enfermedad se convierte en un catalizador de cambios en las vidas de los protagonistas y pone a prueba su valentía, resiliencia y capacidad para encontrar la belleza y la esperanza incluso en los momentos más oscuros.

El autor retrata vívidamente los estragos físicos y emocionales causados por la peste (…) no solo afecta la salud de las personas, sino también la economía, la cultura y la vida cotidiana de Venecia.

En definitiva, la peste que asoló Venecia es un elemento crucial en la trama de «Rojo Veneciano». Óscar Soto Colás logra retratar magistralmente los estragos de la epidemia, transportando al lector a un tiempo y lugar donde la enfermedad y la muerte acechaban en cada esquina. A través de esta representación impactante, la novela nos invita a reflexionar sobre la fragilidad de la vida, la resistencia humana y la búsqueda de la luz en medio de la oscuridad.

Además de la trama principal, la novela también aborda el tema de las falsificaciones de arte, resultando sorprendente descubrir que ya en el siglo XVII existían este tipo de prácticas. Aunque las falsificaciones de arte son comúnmente asociadas con tiempos más recientes, la práctica de copiar o crear obras de arte falsas tiene una larga historia.

Durante el siglo XVII, un período conocido como el Barroco, el mercado del arte estaba en pleno auge. La demanda de obras maestras era alta, y los coleccionistas, mecenas y marchantes de arte estaban dispuestos a pagar grandes sumas por piezas valiosas. Esta situación generó una oportunidad para que surgieran falsificadores que intentaran aprovecharse de la demanda y obtener beneficios económicos.

Juana de Castro, aunque es un personaje ficticio, está inspirada en las escasas pintoras conocidas de aquella época, lo que añade un toque de autenticidad a la historia. En «Rojo Veneciano», la falsificación de arte es uno de los temas que se exploran, brindando una visión fascinante de la época y revelando cómo incluso en tiempos pasados, el mundo del arte no estaba exento de fraudes y engaños.

En resumen…

«Rojo Veneciano» es una novela intensa con una gran historia que la respalda. Óscar Soto Colás logra atrapar al lector con su narrativa cautivadora y detallada. transportándonos a un pasado lejano y sumergiéndonos en los desafíos y triunfos de Juana de Castro. Es una obra que combina elementos históricos, personajes memorables y reflexiones sobre el arte y la vida, creando una experiencia de lectura inolvidable. Solo puedo añadir que me ha gustado mucho y que la he disfrutado a lo grande.

Si os han entrado ganas de conocer más sobre la novela podéis leer aquí un fragmento que nos proporciona Espasa en su web.