Un Fin de Semana en el VII Certamen Internacional de Novela Histórica Ciudad de Úbeda
Desde el tren que me lleva a casa me dispongo a contaros el maravilloso fin de semana que he pasado, un año más, en el Certamen Internacional de Novela histórica de Úbeda. Como ya sabéis, por años anteriores, durante unos días se celebra en la ciudad patrimonio de la humanidad, un certamen donde se reúnen algunos de los mejores escritores del momento y grupos de recreación histórica.
Este año se ha recreado la Batalla del Somme, el movimiento sufragista femenino y se ha conmemorado el final de la 1ª Guerra Mundial. También ha habido charlas sobre los aviadores en la Primera Guerra Mundial o la ingeniería militar del siglo XVIII.
Pero vamos a lo que a mí me interesa de verdad, los libros, sus historias y sus autores. Ha sido un fin de semana lleno de experiencias, encuentros y presentaciones.
Empezamos por el viernes. La primera presentación fue la de la novela de Fernando Martínez Laínez, «La Batalla (La senda de los Tercios 2)». No asistí porque no llegamos a tiempo y además tenía lugar en una librería de Úbeda que se encontraba bastante lejos de nuestra ubicación así que, cuando llegamos, ya había terminado. Sí nos dio tiempo a la de Álvaro Arbina, autor idolatrado por este blog y por su creadora. Por dolorosas circunstancias no pude asistir a la presentación que de su novela hizo el mes de marzo pasado, pero Úbeda me resarció. Álvaro nos contó, sin hacer spoilers y con una gran simpatía, la historia de su «La Sinfonía del Tiempo», nos habló de los comienzos del siglo XX en Europa y España, de los avances que hubo a nivel industrial, también nos contó que su novela finaliza en los albores de la 1ª Guerra Mundial porque él tenía claro que no era de eso de lo que quería hablar. Fue una charla muy interesante y muy distendida que supo guiar muy bien el moderador Pedro P. Uceda y que contestó con simpatía y saber hacer Álvaro.
Siendo viernes y después de una larga semana de trabajo, nos fuimos a cenar todos al hotel, escritores, editores y prensa (entiéndase periodistas y los blogueros que por afición hacemos de nuestro hobby una religión). Cuando terminamos de cenar, y a pesar del cansancio, algunos no nos resistimos a tomarnos la copa, Pablo L. Antonelli, organizador del Certamen se unió a nosotros porque sólo él sabe como unir a personas tan dispares en unvariopinto grupo. Mientras tomamos las copitas reímos y discutimos sobre lo humano y lo divino y lo pasamos genial.
Al día siguiente fue duro levantarse, lo que se viene a llamar resaca, que una ya no tiene años para beber, y las pocas horas dormidas pasaron factura pero no tanta como para que no se pudiera superar con dos cafés bien cargados y un nolotil. Y nos dispusimos a pasar un segundo día que sería frenético. Por la mañana. A las once de la mañana se debería haber entregado el Premio Los Cerros de Úbeda 2018 a la mejor novela histórica publicada en 2017 y que se iba a entregar a José Calvo Poyato por su novela «El espía del rey», no se celebró el evento pues el autor estaba firmando en la Feria del libro de Tarazona y no podía asistir a la cita. De ese modo se pasó a la siguiente actividad que era una mesa redonda sobre la novela histórica japonesa moderada por David Yagüe y en la que participaban David B. Gil y Sergio Vega quienes, con sus novelas «El guerrero a la sombra del cerezo» y la trilogía «Las piedras de Chihaya», respectivamente mostraron sus artes en el conocimiento de la cultura japonesa desmontando muchos mitos y mostrando su admiración por la cultura del país nipón. Dato curioso que desconocía: los japoneses vieron por primera vez en su historia a un occidental en la primera mitad del siglo XVI cuando llegaron allí por casualidad unos mercaderes portugueses. Fue una mesa muy interesante que generó muchas preguntas.
Después era el turno de Francisco Narla, autor que nos presentó su última novela, ganador del 1er Premio de novela histórica de Edhasa, «Laín, el bastardo». Con ingenio y buen humor nos presentó la historia del pequeño bastardo y del trovador Martín Codax. Fue esta una presentación muy interactiva que a mí me gustó mucho.
Después comimos, reímos, un café largo y de nuevo a las presentaciones, en esta ocasión le tocaba el turno al gran Sebastián Roa, autor también adorado por este humilde blog, con su novela «Enemigos de Esparta». Presentado por el periodista Javier Velasco nos introdujo en el mundo de la antigua Grecia, de Tebas, de la lucha contra el implacable poder de los espartanos, sobre el Batallón Sagrado… una charla interesantísima que, para los que amamos sus novelas fue un placer escuchar. Al finalizar esta presentación tuvo lugar un buen debate entre lo que una novela debe tener de real y de novelado, unos instantes fantásticos donde se habló de literatura al más alto nivel.
Más tarde tuvo lugar la presentación de la novela de Jorge Molist «Canción de sangre y oro», presentada por Javier Velasco también (que hizo doblete hasta que se marchó para no volver) y nos habló de su obra, una novela con muchos años de trabajo por medio, una niña casada con un rey castellano mucho mayor que ella y una lucha por el poder, una novela muy interesante que no tardaré en leer porque me dio muy buenas sensaciones y yo, además, siempre confió en Jorge Molist. Para mi sonrojo, mi querido Javier se marchó y regreso vestido de Bobby inglés porque se iba a enfrentar a las sufragistas y por ello, me pasó el testigo a mí que, muertecica de vergüenza y con ganas de asesinar a alguien, me subí al estrado y seguí con las preguntas de los presentes y animando a que compraran tan apetecible novela.
Luego tocaron unas cañitas y marchar al cocktail que se nos preparó en el hotel, allí, estoicamente y como buena espartana, resistí de pie con mi fascitis y mis pies cabos. Este cocktail nos dio la oportunidad a los asistentes de relacionarnos con todos y así le pedí a Olalla García, que me firmara su novela «El taller de libros prohibidos», ya que ella la presentó el miércoles pasado y a mi no me da la vida para poder estar acompañándola. También conocí al que es flamante ganador del Premio de Novela Histórica Ciudad de Úbeda este año, Marcelino Santiago Yustres cuya novela «In Civitate Regia» se ha alzado con este premio que conlleva 10.000 € y la publicación por parte de la Editorial Pàmies. Las novelas presentadas a esta edición han sido de tal calidad que incluso la que ha quedado en tercer lugar será publicada por esta editorial. No deja de ser curioso el hecho de que el año pasado no hubo calidad en los manuscritos y no se premió novela alguna y, sin embargo, este año se hablaba de podría haber incluso cinco novelas con posibilidades de ser publicadas. No cabe duda que el Certamen va ganando en consideración para los literatos. Después de todo esto, que parece que me he enrollado, nos fuimos de copas, volvimos a hablar de lo divino y humano y yo me cobré la jugada que me había hecho mi amigo Javier Velasco de «Todo Literatura».
Desgraciadamente llegamos al último día de la presencia nuestra en Úbeda, todo lo bueno acaba pronto, todo tiene su fin, pero lo aprovechamos al máximo. a las once tuvo lugar la presentación de «Hispania: El sueño de un rebelde», de Agustín Tejada quien fue presentado por su editor Carlos Alonso de la editorial Pàmies. Nos contó a todos los presentes la trama de su novela , la historia de Sertorio y las guerra en Hispania, una historia que nos toca muy de cerca y que parece que tenemos olvidada todos. La lucha de un romano contra el Imperio romano en Hispania, nuestra Hispania.
Después le tocó el turno a «La peregrina», la nueva novela de Isabel San Sebastián quién fue presentada por Emilio Lara, autor de «El relojero de la Puerta del Sol» entre otras novelas. Lamento decir que sé que asistió mucha gente pero nada más pues yo tuve que irme por cuestiones de tiempo.
Un año más, Úbeda ha estado en la cima de la novela histórica, lo mejor de lo mejor se ha juntado allí estos días. Cabe destacar que lunes, martes y miércoles también ha habido charlas, Jesús Maeso ha presentado su novela «Comanche», recibiendo el I Premio Ivanhoe, y Olalla García presentó «El taller de libros prohibidos».
Siempre es un placer asistir a estos eventos pero, cuando además te sientes entre amigos, es una auténtica gozada. Muchas gracias a Pablo L. Antonelli, organizador del Certamen por su saber estar en todo, por parecer Dios estando en todas partes y por mimarnos de la manera que lo hiciste, gracias Pedro P. Uceda, porque nos debíamos un abrazo y nos lo dimos con creces, y gracias Sebastian Lozano porque tu honorífica función se deja notar siempre en tu presencia y gracias por ser un maravilloso chofer. Se te quiere.
Ya ha empezado la cuenta atrás para la próxima edición y no dudéis que ya estoy contando los días.
Hola, ha sido un fin de semana estupendo, que envidia me das, me alegro mucho por ti y gracias por compartirlo, muy interesante todo. Besos.
Muchas gracias, cada vez que lo recuerdo me emociono, lo pasé tan, tan bien…
Madre mía , debió de ser embriagadoramente agotador. Me alegro mucho por ti, porque se nota que lo disfrutaste mucho, y mil gracias por tan completa crónica. Bss
Si, querida Conchaerp viva el cansancio cuando es de esta forma. Lo malo fue la semana que vino después….
Me he agotado sólo de leerte, pero bendito cansancio…
Me alegro que lo hayas disfrutado y te agradezco que lo compartas con nosotros. Mil besos.
Muchas gracias, Gema, fue fantástico, maravilloso, siempre diferente.
hola, ya veo que fue un fin de semana de los más interesante y que lo disfrutaste un montón. Gracias por contarlo por aquí.
Gracias, fue genial, maravilloso.
Pero qué bien te lo has pasado! Y qué estupenda crónica nos has dejado! Gracias!!!
Besotes!!!
Si, es una experiencia maravillosa.